Prótesis de rodilla
El reemplazo unicompartimental de rodilla implica sustituir uno de los tres compartimentos de la rodilla (medial, lateral o patelofemoral). Este procedimiento es ideal para pacientes con artritis avanzada en un solo compartimento, siendo el más común el reemplazo del compartimento medial. Este enfoque permite conservar la mayor parte de la rodilla natural y generalmente resulta en una recuperación más rápida y menos dolorosa que un reemplazo total de rodilla.
Los reemplazos parciales de rodilla suelen tener un tiempo de operación más corto, menos pérdida de sangre, menos trauma en la rodilla y permiten una recuperación más rápida. La mayoría de estos procedimientos se realizan de forma ambulatoria hoy en día.
Eres un buen candidato para un reemplazo parcial de rodilla si:
- Tienes artritis avanzada en solo un compartimento.
- Tienes estabilidad ligamentosa, sin rotura del LCA.
- Pesas menos de 100 kg (220 libras).
- Tienes una deformidad moderada de la rodilla, con un varo inferior a 10 grados.
- Disfrutas de un buen rango de movimiento en la rodilla.
- Eres menor de 50 años o mayor de 65 años.
- No padeces artritis reumatoide.
- No has tenido cirugías previas en la rodilla como reconstrucciones de ligamentos, fracturas u osteotomías.
La mayoría de los implantes utilizados actualmente están hechos de aleaciones de titanio con recubrimientos de superficie porosa con o sin hidroxiapatita, lo que permite la osteointegración (fijación biológica del implante) y el crecimiento de hueso dentro de esa superficie, garantizando una fijación estable y duradera.
El reemplazo de rodilla solo se indica en pacientes que no han tenido éxito con tratamientos no quirúrgicos. Algunas opciones de tratamiento no quirúrgico incluyen el uso de férula de descarga, donde una buena respuesta sugiere que podrías beneficiarte de un reemplazo parcial. Las inyecciones de cortisona son útiles para posponer la cirugía y se recomiendan radiografías cada 6-12 meses para monitorear el progreso. Las inyecciones de ácido hialurónico son generalmente indicadas para pacientes con osteoartritis leve. La pérdida de peso es crucial, ya que el peso es un criterio importante, por lo que se recomienda optimizarlo lo máximo posible. Además, la modificación de la actividad puede ser beneficiosa; si solo experimentas dolor al correr, podrías considerar ejercicios menos intensos como el ciclismo.
El reemplazo de rodilla solo se indica en pacientes que no han tenido éxito con tratamientos no quirúrgicos.
Las ventajas del reemplazo unicompartimental de rodilla en comparación con el reemplazo total de rodilla incluyen una incisión más pequeña, lo que implica menos daño a los tejidos circundantes y menor pérdida de sangre debido a la menor invasividad de la cirugía. Esto permite una recuperación más rápida, ya que los pacientes suelen recuperarse más rápidamente que con un reemplazo total de rodilla, experimentando menos dolor postoperatorio y una recuperación más cómoda. Además, se logra un mejor rango total de movimiento porque solo se reemplaza una parte de la rodilla, preservando más de la mecánica natural de la misma. Muchos pacientes también informan que la rodilla operada se siente más como una rodilla natural en comparación con un reemplazo total, proporcionando una sensación más natural en el uso diario.
